Son tres selecciones nacionales fundamentalmente las que han pasado a los anales del deporte rey gracias deleitar al respetable con su juego, mientras que la gloria de los títulos se la llevaban otros, por orden cronológico son las siguientes:
- La Hungría del 54: Formalmente, este combinado sí que obtuvo un oro olímpico en los juegos disputados en Helsinki en 1952, no obstante, la prueba de fuego para el equipo liderado por Puskas y Kocsis llegaba en el Mundial del 54 que tendría lugar en Suiza. Previamente Hungría venía de ganar a Inglaterra por 3-6 en Wembley y 7 -1 en Budapest. Así, el equipo magiar comenzaba la fase de grupos goleando a la todopoderosa Alemania por ¡8-3! además de endosarle un 9-0 a Corea. En cuartos, la víctima fue Brasil a quienes golearon por 4-2 y en las semis la Uruguay del maracanazo también sucumbió ante el equipo húngaro. La final, enfrentaba de nuevo a Alemanes y Húngaros, el recuerdo de los ocho goles en la fase de grupos y que Hungría comenzase ganando 2-0 esa final no hacía presagiar lo que ocurrió, el llamado "Milagro de Berna", los alemanes consiguieron darle la vuelta al marcador y dejar sin trono al favoritísimo equipo de Puskas. La posterior revolución en Hungría impidió que este equipo consiguiera cosechar algún título, por suerte si que quedará la belleza de su fútbol ofensivo en el recuerdo.
- La Holanda de Cruyff: Conocida también como la naranja mecánica, el equipo liderado por Johan
Penalty de Neeskens, 1-0 para Holanda en el min. 1
- El Brasil del 82: Esta selección de ensueño liderada por Zico, Sócrates o Toninho Cerezo se presentaba en el mundial de nuestro país con una tarjeta de visita inmaculada. En una gira europea el año antes, consiguieron vencer a Inglaterra en Wembley, a la Francia de Platini o la actual campeona de Europa, Alemania. Y así fue como comenzaron el Mundial, ganando todos los partidos de su grupo, sin embargo, una segunda fase donde en lugar de cruces había otro grupo de tres equipos resultó fatal para el combinado brasileño. Aquella tarde de Sarriá siempre será recordada por el Hat-Trick de Paolo Rossi y la defensa hombre a hombre de Italia que desbancó a los brasileños. Afortunadamente, el tiempo lo ha puesto todo en su sitio y son muchos los entendidos que colocan a esta selección como la que más se acerca a la Brasil del 70, pese a que ni siquiera lograran alcanzar las semifinales.
Bueno esta entrada no es más que un pequeño homenaje a esos equipos que consideran el fútbol como un espectáculo por encima de todo, más allá de la gloria de los títulos, y es que como decía el actual seleccionador de Colombia José Pekerman "Jugamos para ganar, pero el más importante es el que juega mejor".