Gracias Alavés

Hoy lunes se cumplen 10 años de la que para mí ha sido la final europea más impresionante que recuerdo, y es que un 16 de Mayo de 2001el Deportivo Alavés se plantó en toda una final europea ante yn Liverpool que ya contaba en sus filas con un jovencísimo Gerrard o Michael Owen entr otras figuras.

El WestfalenStadion de Dortmund fue testigo de la final de la Copa de la UEFA de 2001 donde medirían sus fuerzas un experto en esas lides como era el Liverpool que por aquel entonces entrenaba Gerard Houllier ante un novato Deportivo Alavés que tan solo había disputado una campaña en la Primera Divisón española.



Camiseta utilizada en la final de la UEFA


El camino del equipo vasco en la competición europea comenzó con un paupérrimo empate a cero ante los turcos del Gaziantespor, no obstante un partido de vuelta memorable donde los vitorianos vencieron por 4 goles a 3 hizo que el equipo albiazul se plantara en la siguiente ronda. Así posteriormente consiguió doblegar a los conjuntos noruegos de Lilestrom y Rosenborg, llegando a octavos de final donde le esperaba el todopoderoso Inter de Ronaldo y compañía. En esa eliminatoria el todopoderoso pasó a ser el Deportivo Alavés quien dejó en la cuneta al equipo neroazzurri con victoria a domicilio incluida. Las posteriores victorias ante rayo Vallecano y Kaiserlautern consiguieron que uno de los equipos más modestos de nuestra Liga consiguiera hacerse un hueco entre los grandes del fútbol europeo.

Javi Moreno, autor de dos goles ese día

Y llegó el 16 de mayo, la ciudad de dortmund sería testigo del que hasta ahora está considerado como la mejor final de la historia de la competición. Un Alavés vistiendo a lo Boca Juniors comenzó el partido con mucho nerviosismo, prueba de ello es que antes del minuto 20 el equipo vasco ya perdía por 2 goles a 0. No obstante los de Mané no se achantaron para nada y antes de la media hora consiguieron acortar distancias gracias a un gol de Iván Alonso. McCallister vovió a ampliar distancias en el marcador, no obstante, los aguerridos vitorianos siguieron insistiendo consiguiendo empatar el partido con sendos goles de Javi Moreno. Nuevamente el equipo red volvió asestar un duro golpe anotando el 4 a 3 pero Jordi Cruyff poco antes del final del tiempo reglamentario empató el partido acelerando los corazones de todos los aficionados que estabamos viendo el partido ese día.

Por desgracia la prórroga no fue más que una lenta agonía para nuestro modesto equipo, un gol en propia puerta de Geli al comienzo de la misma, puso un 5 a 4 definitivo en el marcador que hizo romper en pedazo el sueño de este modesto equipo de España. A pesar de todo ello y pese a no ser campeones, un equipo vasco consiguio durante dos horas que todo un país estuviera unido apoyando una misma causa motivos políticos aparte.

Con este artículo me retiro hasta mediados de Julio cuando volveré con más y mejores historias. Un saludo para todos y todas